Entiendo que todos compartimos
la visión de un año muy raro, con una economía que no despega, y con ventas
que son irregulares según los meses y que no terminan de darnos certidumbres
sobre rentabilidad y sobre si podremos afrontar los costos crecientes
(salariales, impositivos, etc)
Esto está pasando con muchos de nuestros clientes: desde la venta de
inmobiliarios, consumo masivo, servicios, tecnología, ropa, seguros, motos,
etc. El único rubro que tiene un comportamiento notoriamente distinto son
nuestros clientes del sector agropecuario.
Frente a este contexto, muchas empresas (y varios de esos clientes) han tomado la decisión de
esperar para ver cómo evoluciona el mercado. Hay proyectos en carpeta
esperando o que avanzan pero tímidamente. También campañas, apertura de nuevos locales, abordajes de nuevos
mercados, lanzamiento de nuevos productos, acciones institucionales, etc.
No quiero ser "mala onda". Pero tengo la certeza que la
situación que estamos viviendo -y este mercado con estas características- será
una constante por los próximos años. Porque ésta es la economía real de Argentina, ya no "pichicateada" por la maquinita o las cifras dibujadas.