Los médicos aman esos avisos publicitarios formales con el equipo formado como en "V" con el médico cabecera adelante y los acompañantes a los costados, todos con sus guardapolvos blancos y mucho "fierro" tecnológico de última generación alrededor.
"Calidad" "excelencia" y otras palabras son comodines que -para ellos- no pueden faltar en ninguna pieza (para poner las cosas en su justo lugar, no lo hacen de mala fe! Sólo es que están muy alejados del fenómeno de la comunicación)
Pero si un publicitario cae en la tentación de hacerles caso, caerá irremediablemente en una "comunicación tipo comodity" que al final del camino no los diferenciará, ni les dará resultados concretos.
Oxford tiene en su haber un verdadero "caso de éxito" que fue el lanzamiento de la cobertura de Salud de Hospital Privado, en plena crisis del 2002. El éxito no sólo estuvo dado por los resultados de esa campaña (se lograron incorporar más de 80.000 adherentes a la prepaga en un período de tiempo muy breve) sino también -a los efectos de los que estamos hablando aquí- por el tenor de la comunicación, que rompió con todos los moldes.
"Te queremos sano" le decía el hospital a sus potenciales pacientes y convocaba a una vida plena a través de su comunicación y de su "club de la salud". Aquello mereció en su momento un Premio Mercurio.
Con el Hospital Privado llegamos a hacer comerciales muy "divertidos", es decir que apelaban incluso al humor para vender salud, lo que fue toda una innovación para el marketing del sector, no sólo a nivel de Córdoba sino también nacional (para ver algunos de esos comerciales se puede hacer click aquí)
En estos meses, el equipo de Oxford tuvo una alegría similar al poder dar asistencia a Diagnus, una institución liderada por el respetado Dr. Ochoa y un equipo de profesionales de altísimo nivel en lo que hace a Diagnóstico por imágenes.
La estrategia que se definió fue un abordarje 100% de mkt digital para llegar a su público objetivo. Y allí nos permitieron presentar a la institución y contar una historia sencilla de una madre que les debe mucho por haber detectado en forma temprana un problema de salud de su bebé.
La fuerza de esta historia llena de fuerza toda la comunicación. Le da sustento a todo lo que se presenta, lo hace concreto, humano, sensible... llega no sólo al conocimiento sino al corazón.
Los resultados ya lo están sintiendo en forma muy concreta con un aumento de turnos, consultas (y felicitaciones a los directivos de parte de sus colegas y comunidad médica!)